8 días en Islandia

Islandia es un país insólito de paisajes increíbles.

Con una naturaleza indómita de origen volcánico, presenta costas abruptas, mesetas desérticas heladas, glaciares, cordilleras y fiordos. Situado a medio camino entre Europa y América, varada en medio del Atlántico Norte sobre la dorsal atlántica que divide ambas placas continentales, esta gran isla volcánica de un tamaño similar a Portugal, es un como un gran libro abierto de geología. En ella se pueden descubrir gigantescos campos de lava, cráteres y fumarolas, que nos hablan del fuego; pero también, extensos lagos, glaciares y multitud de cascadas que nos traen el agua y el hielo. Un sinfín de contrastes geográficos causados por una geología reciente, que parece querernos narrar la historia de la Tierra.

Puedes dedicar a Islandia desde tres días a más de un mes, depende de tus inquietudes, tiempo disponible y tipo de turismo que buscas. Si lo que te apetece es conocer lo mejor un país de naturaleza virgen, paisajes increíbles conviene dedicar entre una semana y quince días para hacerse una idea y disfrutar mucho sin atropellarse con el tiempo. En este artículo, os explico como fue nuestro viaje de ocho días por la isla volcánica más grande del mundo.

Cómo llegar y moverse:

Iberia ha comenzado a volar al aeropuerto internacional de Keflavik, que está a unos 50kms de la capital Reykiavik. Es un vuelo de unas 4 horas, y puedes obtener buenos precios comprándolos con anticipación. A nosotros nos salió el billete de ida y vuelta por 180€.

Cómo moverse en Islandia:

Para moverse por Islandia lo mejor es alquilar un coche. Hay transporte público que llega hasta los destinos más turísticos pero las distancias y las frecuencias hacen desaconsejable esta alternativa salvo en casos puntuales. Un coche de alquiler tipo SUV o 4×4 económico tipo Dacia Duster nos salió por 350€ para ocho días de viaje. Los precios son más elevados que en España en todas las categorías.

Carreteras:

Las carreteras suelen estar en buen estado, pero en invierno hay muchas (sobre todo en el interior) que pueden estar cerradas o con acceso restringido a vehículos 4×4 y con neumáticos especiales. Es conveniente comprobar el estado de las carreteras antes de partir, si bien es cierto, que la Ruta 1 que rodea la isla y las que conforman el «Círculo Dorado» y los alrededores de Reikiavik suelen estar abiertas todo el año.

De realizar excursiones por caminos para 4×4 es muy importante tomar las precauciones habituales, y sobre todo no intentar vadear ríos que pueden presentar súbitas crecidas.

Vuelos internos:

Otra opción a considerar es la de tomar vuelos internos para visitar los lugares más remotos. Por ejemplo, volar a Myvatn / Akureyri puede ser una alternativa ideal para visitar los sitios más interesantes del norte del país, evitando recorrer más de 800 kms en coche. Lo malo es que los precios son bastante altos. Consultar Icelandair, un billete de ida y vuelta desde 180€.

Más lujo aún supone poder realizar algunas visitas en helicóptero. Hay varias compañías que ofrecen rutas que van desde los 45′ a excursiones de día entero. Los precios comienzan a partir de 250€: Consultar compañías como: Helo Helicopter Service o Iceland, Reykiavik Helicopters, Volcano Heli-Iceland, entre otros.

Cuándo ir:

Cuando ir:

La mejor época del año para visitar Islandia es de junio a agosto, en el que las temperaturas pueden oscilar entre los 5º y 15º, hay un mayor número de días soleados y sobre todo las horas de sol son casi eternas. Al estar situado tan cerca del círculo polar, los días son interminables y las noches son prácticamente inexistentes durante los meses de junio y julio. El sol desaparece apenas un par de horas pero los cielos siguen estando iluminados por un crepúsculo constante.

Sin embargo, Islandia también puede ser un destino de invierno. Los días son muy cortos (apenas tres o cuatro horas de luz al día) pero los paisajes helados y cubiertos de nieve son verdaderamente maravillosos, pero es sin duda, la posibilidad de observar el fenómeno astronómico de las auroras boreales, la razón estrella para ir a Islandia entre los meses de noviembre y febrero.

Islandia – Antes de Viajar

Clima:

Aunque Islandia está situada justo bajo el círculo polar Ártico, su clima se ve favorecido por la corriente del golfo que suaviza sus temperaturas, bastante más benignas respecto a lo que le correspondería por su latitud. No obstante, la lluvia y el viento son constantes y el viajero debe prepararse para las inclemencias de un clima frío oceánico.

Paisaje & Geología:

Islandia es la tierra del hielo y del fuego. La isla posee una extensión de 103.000 km2 surgidos enteramente de erupciones de magma procedentes de la falla dorsal del Atlántico norte que separa las placas continentales de América y Europa. La actividad volcánica es de tal magnitud, que se calcula que Islandia ha reunido más de un tercio de todo el magma escupido por el núcleo terrestre hacia la superficie desde la época de los dinosaurios. (Sirva de comparación que Islandia es 50 veces mayor que Tenerife -2.ooo km2 –  que es una de las islas volcánicas más grandes de los archipiélagos macaronésicos)

Las erupciones han modelado un paisaje de cordilleras montañosas, mesetas pedregosas heladas, fiordos y campos de lava, así como grandes extensiones de detritos y arena volcánica que llegan hasta la costa creando llanuras costeras aluviales de rareza y colores únicos. Las cotas más altas en el sureste de la isla llegan hasta los 2000 metros en Vatnajokull. Como media se calcula que hay una erupción volcánica cada 5 años, algunas de las cuáles se han hecho muy famosas en Europa por los estragos causados en el tráfico aéreo por la formación de colosales nubes de ceniza, la última fue gentileza del Eyjafjallajökull (¡y ahora ensaya para pronunciarlo!)

Hasta un 11% de su superficie está cubierta por glaciares, un 3% está cubierto por lagos. Solo una cuarta parte (25%) está cubierta de vegetación, el resto corresponde a campos de lava en mayor o menor medida colonizado por líquenes según la antigüedad de las erupciones. Entre los suelos volcánicos, se pueden descubrir innumerables campos de actividad magmática como las fumarolas, sulfataras y el fenómeno de los géiseres, cuyo nombre en todo el mundo viene precisamente de aquí.

Islandia tierra de Cascadas:

Islandia es la tierra de las cascadas. La abundancia de precipitaciones, de lluvias y glaciares, alimenta caudalosos ríos. Algunos llegan a tener más de 200 km de longitud, con caudales congelados en invierno que en primavera y verano multiplican su fuerza creando verdaderas maravillas en sus saltos y cataratas.

Algunas de las más bellas que hemos visitado: Saltos como Skogafoss que alcanza los 60 metros de altura; las de Dettifoss que con sus 44 metros de altura, son las de mayor caudal de Europa; las de Gulfoss con 32 metros de altura en dos escalones junto a Geysir; las de Godafoss (o de los dioses) llamada así por ser donde se arrojaron los ídolos nórdicos cuando Islandia abrazó el cristianismo; las de Seljalandsfoss, con una cortina de agua que se puede traspasar para observarla desde el interior de una majestuosa gruta; o las geológicamente únicas de Svartifoss donde el agua se abre paso entre pilarres de granito con formas de columnas geométricas.

Fauna & Flora:

La peculiaridad y aislamiento de Islandia, hace que los mamíferos sean poco abundantes tierra adentro. Los más característicos sean los curiosos caballos islandeses (que parecen ponis), la oveja islandesa (de pelo largo e introducida desde Noruega junto con los primeros colonizadores), algunos renos que pueblan las montañas del interior igualmente introducidos para la ganadería extensiva desde Escandinavia.

Sin embargo hay numerosas especies de mamíferos marinos, y es precisamente la observación de cetáceos una de las actividades turísticas más extendidas en los puertos islandeses como Reikiavik o Husavik.

La inaccesibilidad y lo recóndito de los numerosos parajes marino-terrestres que la extensa costa islandesa presenta han sido a lo largo de la historia un verdadero santuario para muchísimas especies de aves. Islandia es un paraíso ornitológico para más de 70 especies de aves que anidan y viven en su territorio.

Los espacios protegidos más emblemáticos son: la penísula Snaefellsnes y Labtrabjarg al oeste; las islas Vestman, al sur; y los humedales de Mývatn en el interior. De entre todas las especies que anidan o migran cada año a Islandia, el frailecillo es la más característica. Este simpático ave que vuelve cada abril para criar en sus nidos habituales, se ha convertido además en uno de los reclamos turísticos más exitosos, y el objeto de numerosos recuerdos.

De la flora hay que resaltar las numerosas especies de musgos y líquenes que colonizan los campos de lava en diferentes grados, algunos son como verdaderas alfombras que cubren como moquetas las aristas de la roca volcánica llena de aristas y huecos. En las pocas zonas de Islandia que están cubiertas por vegetación, es sorprendente la escasez de árboles, y entre las especies arbóreas destaca el abedul, uno de los que mejor soportan los rigores del frío, y que a menudo se presentan como arbustos mezclado con otros matorrales.

La flora silvestre es abundante, destaca sobre todo la sempiterna violeta islandesa, que florece en altramuces cubriendo muchísimos campos y vegas de los ríos en Islandia. Es todo un espectáculo cromático, que se mezcla con un verde fosforescente de los prados de hierba en casi todos los rincones cubiertos de vegetación del país.

Organizando el Viaje

Disponiendo de 8 días para conocer el país, y siendo conscientes de que todo no podríamos verlo, seleccionamos un itinerario que cubriera los mejores puntos de interés, y que incluyera la máxima diversidad de sitios posible.

Decidimos repartir nuestras noches de estancia asi: tres noches en Reykiavik para usarla como base a todas las visitas cercanas a la capital, y otras cuatro noches para dar la vuelta a la isla por la Ruta 1, dado que en torno a sí reúne la mayor parte de los mejores atractivos de la isla.

Días 1, 2 y 3: Reykiavik

Días 4 a 8: Vuelta a Islandia por la carretera #1

  • Día 1: El Sur de Islandia Ruta de las Cascadas
  • Día 2: El este de Islandia – Glaciares, icebergs y fiordos.
  • Día 3: El norte de Islandia – El entorno del lago Mývatn: Campos de lava, cráteres, lagos y baños termales.
  • Dia 4: Regreso desde Akureyri a Reykiavik por el oeste de Islandia.

Nos quedaron en el tintero muchos otros atractivos como las Islas Vetman o la península de Snæfells por mencionar dos de los más significativos. Y la sensación de que las posibilidades de realizar turismo de naturaleza son infinitas en Islandia, con la posibilidad constante de descubrir cascadas apasionantes, rutas de senderismo por glaciares, avistamiento de aves, de ballenas.

Mapa del Viaje a Islandia

En este mapa puedes localizar las zonas que cubren cada uno de los artículos publicados sobre el «Viaje a Islandia». En cada uno de ellos encontrarás un mapa detallado complementario para que puedas navegar hasta todos los sitios descritos en cada post.

Dónde comer:

Dónde comer:

No destaca Islandia por su cocina, ni tampoco por la facilidad de encontrar buenos restaurantes una vez que nos alejamos de los núcleos de población principales. Reikiavik o Akureyri concentran la mayor parte de la oferta gastronómica, y solo aquí se puede tener una cierta capacidad de elección. La cocina tradicional tira de productos locales como el cordero y el pescado fresco.

Sin embargo en las pueblos más pequeños del interior y alrededor de la Ruta 1, las «gasolineras-tienda-restaurante» son la mejor opción. Las de la marca «Olís» son de las más abundantes, y a menudo tienen un espacio de tienda con souvenirs, ropa de abrigo y complementos para el coche, y un espacio de restauración con una carta limitada que incluye los populares «fish & chips«, las hamburguesas o el típico «pylsa«, unos perritos calientes encebollados. A veces había filetes empanados y otras cosas. No es que fueran un manjar, pero a menudo nos vinieron muy bien para repostar y comer o cenar algo. 

Dónde dormir:

Dónde dormir:

En Reikiavik optamos por un Airbnb que nos encantó. Permanecimos 3 noches, aprovechando para conocer todos los sitios que estaban cerca de la capital haciendo dos excursiones; a la Península de Reykianes & laguna Azul, y al Círculo Dorado.

Enlaces
Comienza Viaje – ISLANDIA