Islandia – El Círculo Dorado (Golden Circle)
Una de las excursiones más sorprendentes y gratificantes de todo viajero que llega a Islandia, es la del Círculo Dorado. Y no es para menos, porque en un solo día, se pueden visitar; una de la cataratas más bellas y poderosas de Islandia, Gullfoss; un lugar volcánico por excelencia que además se lleva la fama mundial por bautizar con su nombre a todos los chorros de vapor generados por el calor magmático (los géiser) que se filtran entre las grietas rocosas, y que surgen repentinamente de las profundidades formando columnas de agua de más de 20 metros de altura, Geysir; y un lugar en el que se puede observar cómo dos placas continentales, la de Eurasia y Norteamérica se separan paulatina y lentamente ante nuestros ojos, el Parque Nacional de Thingvellir, donde podremos caminar sobre la misma falla que los separa, y maravillarnos con el lago más extenso de Islandia, Thingvallavatn y su entorno, con algunos de los paisajes más bellos del país.
Y todo ello, con la facilidad de realizarlo por nuestra cuenta, con una buena red de carreteras y señalización, y la tranquilidad de un país seguro y sin atascos. Un recorrido placentero, descubriendo los bellos, agrestes y montañosos paisajes de Islandia, en una ruta circular de unos 250 km que nos llevará todo el día incluyendo las paradas para visitar con serenidad todos estos sitios.
En este mapa encontrarás todos los lugares de interés turístico descritos en este artículo. Puedes usarlo para navegar y llegar hasta todos ellos.
Los lugares tienen ubicaciones precisas en la medida de lo posible pero se puede garantizar que la navegación sea siempre exacta. Hay que tener en cuenta que es una herramienta pensada para facilitar la comprensión geográfica del post y siempre conviene verificarla y usar el sentido común.
1/ De Reikiavik a Urridafoss – Por la Ruta 1 – 80 km (1h10′)
La Ruta 1 que parte de la capital y da la vuelta a toda la isla, es la que tomaremos para dirigirnos a Urridafoss, nuestro primer destino en la excursión del Círculo Dorado. 80 km separan Reikiavik de estas cascadas (aprox.1h10′). La primera parte de estos 80 km la carretera supera un pequeño puerto de montaña que no supera los 400 mts de altura, sin embargo la existencia de remontes, hace entender que más de seis meses al año estas montañas se cubren de un tupido y grueso manto blanco que permite la práctica del ski de montaña a pocos minutos de la capital.
Al bajar hacia Hveragerdi llama la atención en el paisaje montañoso los campos de fumarolas de una zona activa volcánica. En invierno el contraste debe ser muy patente, calvas de tierra, azufre y humo entre la blanca espesura helada.
Pocos km después, al llegar a la localidad de Selfoss cruzaremos un puente que atravies uno de los ríos más caudalosos de Islandia, el Ölfusá (el mismo curso de agua que visitaremos más tarde cauce arriba cuando nos dirijamos a Gullfoss). Aún nos quedan 20 km por la Ruta 1 antes de encontrar el desvío hacia Urridafoss.
Cascadas de Urridafoss
Las cascadas de Urridafoss son el último alto de agua antes del que el río Thjórsá, el más largo de Islandia con 230 km de recorrido, de sus aguas al océano Atlántico. Sorprende la anchura del río y su caudal, aunque no se trate de un cauce muy profundo. Es curioso el nombre del río pues significa río del toro, el sufijo «á» significa río, y Thjór viene del germánico antiguo «toro» (en sueco es «tjur», en danés «tyr»), y puede ser que venga del establecimiento de una antigua granja ganadera en la zona.
Los vecinos de la comarca, se han levantado en contra de un proyecto gubernamental para crear, una central hidroeléctrica en la zona, que prácticamente las haría desaparecer. Hay que decir, que el río Thjórsá es ya la principal fuente de energía hidroeléctrica del país.
2/ De Urridafoss a Gullfoss – Por la Ruta 30 – 70 km (1h.)
Desde Urridafoss (Cascadas de Urridar) hasta Gullfoss se recorren unos 70 km por esta ruta (aprox. 1h). La carretera atraviesa paisajes de granjas, praderas y valles, mientras en el horizonte siempre se divisan las cimas nevadas de los macizos montañosos islandeses que alojan glaciares.
Cataratas Gullfoss
Una de las maravillas de Islandia, las Cataratas Doradas (Gull=oro; foss=catarata) son denominadas así por los reflejos dorados que produce el agua en suspensión producida cuando se mezcla con la luz solar. El salto de agua posee una altura total de 32 metros, las cataratas se dividen en dos gradas; la primera salva un desnivel de 11 metros; y la segunda, más alta, supera los 22 metros de altura. Sorprende el ensordecedor ruido que produce el agua al caer, con sus 140 m3/seg. en verano.
Centro de Visitantes
Se deja el coche en el aparcamiento del Centro de Visitantes, que posee un restaurante y una gran tienda de souvenirs, con una gran selección de libros y mapas sobre Islandia, entre los que hay muy buen material cartográfico y de literatura sobre las mejores sendas para descubrir la naturaleza del país.
Miradores de Gullfoss
Se percibe un sonido grave y profundo que llega desde e el tajo natural sobre el que discurre el río Ölfusá. Siguiendo el camino señalizado es cuestión de momentos el llegar hasta el primer mirador sobre Gullfoss, con su maravillosa vista de conjunto de las cataratas. Es difícil describir la emoción que se siente, todos los paisajes naturales sobrecogen mucho más de lo que te has podido imaginar en fotos o vídeos, porque el ambiente que te envuelve el ruido de las aguas, el agua en suspensión que hace que percibas el olor de la humedad fluvial y la sensación de naturaleza virgen te invade de repente, cuando te das cuenta de que estás frente a una maravilla natural insólita.
<
Sendero de las cataratas
Unos minutos después de realizar las primeras fotos, nos lanzamos a recorrer todo el camino impecablemente marcado que te permite ver estas increíbles cascadas desde un sinfin de puntos de vista distintos. La visita tranquila de las cataratas lleva un par de horas, ya que aunque no se tenga que caminar tanto, la observación tranquila de este fenómeno natural es muy vivificante, y puede dejarte embobado durante largo rato.
3/ De Gullfoss a Geysir – Por la Ruta 35 – 10 km (10′)
Tan sólo 10′ hacen falta para recorrer los 10 km que separan Gullfoss de Geysir. Esta parte de Islandia presenta durante el verano la mayor concentración de granjas y pastos. Los árboles no abundan mucho. Fueron talados los bosques que había por los primeros pobladores y nunca repuestos. A pesar de todo podemos encontrar concentraciones de abedules en algunos sectores, y algunos chopos que acompañan a las granjas esparcidas por el paisaje.
Islandia es un país muy extenso para la población que soporta (dimensiones similares a Portugal con menos de 300,000 habitantes) sin embargo tiene la mayor parte de su territorio cubierto por suelos inhabilitados para la agricultura; glaciares, montañas, campos de lava, malpaís, etcétera… por eso este rincón del país para ellos, y para todos, presenta una cara mucho más amable.
Parque Nacional de Geysir
Llegando a Geysir, conviene dejar el coche en el aparcamiento junto al Centro de Visitantes. Una pequeña exposición con paneles explican lo que es un géiser, el fenómeno geológico al que da nombre global este preciso lugar. Los géiser se llaman así concretamente en honor al Gran Géiser, un gran chorro de vapor que surge de las profundidades magmáticas del subsuelo y que sorprendía a los visitantes con columnas de agua de entre 60 y 80 metros de altura. Se tiene constancia histórica registrada de sus erupciones desde 1294, pero a partir de los años 50 estuvo sin prácticamente actividad alguna. Sin embargo a partir del 2000 recuperó su actividad, aunque de una forma algo más modesta e irregular. Hoy en día registra actividad cada dos o tres días, despidiendo columnas de agua de entre 15 y 25 metros de altura.
Sin embargo, la otra estrella del parque el Géiser de Strokkur no os defraudará. Entra en actividad casi con precisión horaria cada 10′, lanzando chorros que pueden alcanzar entre 20 y 35 metros de altura, a menudo encandenando un par de columnas de agua en la misma erupción. Se tiene constancia de sus erupciones desde 1789. (Ver video)
En verdad, vivir una erupción como esta, es toda una experiencia. Poco antes de que el chorro brote violentamente, se escucha un sonido sordo que surge desde tus pies, retumba la tierra que pisas, y de repente se forma una burbuja de un color azul turquesa increíble que al poco tiempo se convierte en una explosión de agua blanca disparada hacia el cielo. Emociona por mucho que lo veas una y otra vez.
Pero ¡ojo!, si hace viento, la fina lluvia en la que se convierte el chorro del géiser puede caer sobre vosotros, y está hirviendo.
Como se ve en el plano, hay hasta medio centenar de pequeños agujeros con actividad distribuidos en la reducida extensión que conforma este parque, de ellos las grandes estrellas son el Gran Geysir, y el de Strokkur, que poseen actividad como géiseres propiamente.
Los agujeros que albergan los géiser parecen decorados con los colores vivos de los minerales que arrastran las aguas que brotan del subsuelo. Los hay con diferentes combinaciones, pero aquí en Geysir predomina el azul cobalto.
El resto del parque te regala paisajes que desde finales de primavera se pueblan de preciosas flores como los altramuces de un color violeta intenso que abundan por toda la isla.
4/ De Geysir a Thingvellir – Por Rutas 37/365/36 – 60 km (1h.)
Nuestra próxima parada es Thingvellir. Este tramo de la excursión transcurre por la Ruta 37 (30 km hasta Laugarvatn) y después por la Ruta 365 y 36 (otros 30 km más hasta Thingvellir) en total estos 60 km no llegan a 1h de camino. El primer tramo sigue transcurriendo por paisajes de granjas y pastos, hasta llegar a Laugarvatn.
Laugarvatn
No es fácil encontrar muchos restaurantes a lo largo del itinerario de esta excursión, ya que las poblaciones islandesas son muy pequeñas, y por tanto no poseen muchas infraestructuras de servicios. Esta localidad a medio camino entre Geysir y Thingvellir, junto al lago Laugar, es el lugar ideal para comer durante la excursión al Circulo Dorado, ya que es un lugar de veraneo y de fines de semana para los habitantes de Reikiavik, que vienen atraidos por las actividades de pesca, senderismo y otras actividades al aire libre que se pueden realizar junto al lago.
Una vez superado Laugarvatn, cruzaremos de un valle a otro de una misma cuenca hidrográfica, la del Ölfusá el tercer río más largo de Islandia. Hay que superar un pequeño puerto de montaña con paisajes de páramos para alcanzar nuestro próximo destino, Thingvellir.
Parque Nacional de Thingvellir
El Parque Nacional de Thingvellir es gratuito, y posee un centro de visitantes con los servicios básicos y tiendas de recuerdos. Aquí dejaréis el coche para realizar la visita a pie. Solo lleva unos minutos dirigirse hasta los lugares más interesantes. Thingvellir es el Parque Nacional donde las placas tectónicas de Europa y América se tocan, separándose poco a poco.
Pronto uno se da cuenta de la disposición horizontal y paralela de largas tiras de rocas que parecen haberse desgajado unas de otras por tensiones telúricas. Y en efecto, ese es el motivo. La llanura sobre la que se extiende este Parque Nacional esta flanqueada por montañas y cortada de SO a NE por la falla dorsal atlántica. Esta cicatriz de la corteza terrestre es la responsable del alto grado sísmico de Islandia, y constata la frontera natural entre las mencionadas placas tectónicas.
El paseo que se da desde el aparcamiento hacia las cascadas del Öxarar, trancurre literalmente por un callejón de hierba flanqueado por dos paredes de roca de unos 8 metros de altura, y se podría técnicamente decir que a cada lado se encuentra una de las dos placas tectónicas más importantes del hemisferio norte.
Öxararfoss (Cascadas del Öxarar)
El río Öxarar que nace en un glaciar más al norte, se precipita salvando la altura de la pared de roca que ha creado la falla tectónica, cuya fuerzas separan las placas de Eurasia y Norteamérica lentamente a un ritmo de 5 mm. por año.
El río transcurre por el callejón formado por la falla atlántica durante al menos 500 metros antes de precipitarse por una nueva cascada para dar sus aguas a la llanura, formando el lago natural más grande de Islandia. Con 85 km cuadrados, el Thingvallavatn posee algunas características notorias: no se congela en invierno debido por un lado al aporte constante de aguas termales subterráneas, y a que llega a tener una profundidad máxima sorprendente de asta 114 metros, sus aguas conservan una temperatura bastante constante en torno a los 4º todo el año, con una visibilidad asombrosa y con gran riqueza piscícola.
Mirador de Thingvallavatn
El camino se alza sobre un promontorio junto al precioso lago proporcionando unas vistas de todo el valle de Thingvellir, de gran belleza. Desde este punto se tienen las mejores vistas del Parque Nacional de Thingvellir, hacia el norte el estrecho pasillo de la falla tectónica que separa ambas placas continentales, hacia el este, la iglesia de Thingvellir y el espacio donde se reunió el primer parlamento democrático Islandés desde la Edad Media, y hacia el sur, la enorme extensión del lago de Thingvellir, o Thingvallavatn (valla=valle; vatn=lago)
Se pueden recorrer numerosos senderos para acercarse a ver las distintas formaciones geológicas que se distribuyen por el parque, así como para llegar hasta el Alping y la Thingvallakirkja. Al completar nuestra visita, nos disponemos a regresar a Reikiavik para descansar de nuestra jornada de emociones y maravillas naturales de Islandia.
5/ De Thingvellir a Reikiavik – Por la Ruta 36 – 46 km (45′)
Tras esta última visita, retomaremos la Ruta 36 para regresar a Reikiavik que está a 46 km de distancia (aprox. 45′
Pincha en los iconos para ir a las etapas anterior y posterior. Para volver al inicio de Viaje, pincha aquí: «8 días en Islandia»