Bocairent: Valencia serrana y moruna

Aupado en las cumbres de las serranías del sur de la provincia de Valencia, Bocairent presume de su pasado moruno.  Su barrio medieval se agolpa sobre una colina inexpugnable flanqueada por dos barrancos abruptos. Las calles estrechas, empinadas y tortuosas son el recuerdo de otros tiempos donde solo un emplazamiento de fácil defensa y un recinto amurallado otorgaba garantías de seguridad.

En las faldas de la Serra Mariola, divisoria provincial con la vecina Alicante, Bocairent es uno de los pueblos con mayor encanto de la Comunitat Valenciana. El entorno natural es su gran activo. Muchos visitantes llegan hasta aquí buscando las noches frescas de montaña, el senderismo y los deportes al aire libre que se pueden practicar en la zona.

Cómo llegar:
Bocairent está situado a unos 90kms de Valencia, se llega por la A-7, autovía en su mayor parte salvo los últimos 15kms que desde Ontinyent son de carretera sinuosa. Desde el sur, la llegada por el contrario es muy fácil sin apenas cuestas, ya que la villa se encuentra situada en los comienzos del escarpe serrano, a casi la misma altura que la submeseta manchega. Desde Albacete (132kms / 1h30»)Alicante (90kms / 1h) lo más cómodo es ir hasta Villena por autovía y desde ahí recorrer los útimos 30kms por una carretera bastante buena y recta. 
Un poco de historia
En el término municipal de Bocairent se han descubierto yacimientos del neolítico, se ha constatado población ibera e incluso alguna villa romana ha dejado su rastro en las planicies de montaña, pero fue durante la dominación musulmana cuando la población cobra relevancia. Bekirent fue una importante localidad del reino taifa de Denia. En 1245 las huestes de Jaime I de Aragón entran victoriosas en Bocairent que desde entonces pasa a pertenecer al Reino de Valencia. De su pasado moruno quedan rastros en su gastronomía, en sus huertas y acequias, y por supuesto en sus fiestas, «Moros y Cristianos» que son características de toda esta comarca.

Las fiestas de Moros y Cristianos es celebrada en Bocairent por todo lo alto. Hay nueve comparsas, cinco cristianas y cinco moras que desfilan cada año en febrero, coincidiendo con el día de San Blas (2 de febrero), patrono de la localidad. Un Museo Fester, exhibe indumentarias históricas y explica el desarrollo de la fiesta.

La manta bocairentina, famosa por su calidad, fue históricamente el producto estrella de su artesanía. Y es que la industria textil ha estado siempre presente. Ya en 1587 Felipe II le otorgó una Real Fábrica de Paños que lo ratifica. Y es precisamente el santo patrón de los cardadores de lana, San Blas, el patrón de Bocairent. 

Visita de Bocairent

La mejor manera de comenzar la visita es atravesando el puente de piedra más antiguo de Bocairent, el «Ponte Darrere de la Vila» que por el sur daba acceso al centro histórico. Desde aquí además se tiene una de las vistas más bellas del conjunto de la villa. Hay un parking señalizado en el mapa en donde podréis dejar el coche.

Plaça de l’Ajuntament (Plaza Mayor)

Desde aquí hay que seguir remontando por calles empinadas y tortuosas hasta que el espacio se abre en la Plaza Mayor. Tiene forma irregular. Uno de sus lados, el que da a la iglesia, está acotado por una pared de roca. Esto ha permitido que los edificios medievales pudieran alcanzar una altura considerable al apoyar sus cimientos sobre estas rocas.

Escut de Bocairent

Escudo de Bocairent

El Ayuntamiento se alza en el centro de la plaza. Aquí está también la Oficina de Información Turística, en donde podréis obtener información de visitas y actividades.

La Iglesia se halla en el punto más alto del barrio medieval. Ocupa hoy el espacio del antiguo alcázar árabe. De subida hallamos el Museo Arqueológico, antes de alcanzar la plazuela a la que se abre la entrada principal del templo.

Museo Arqueológico

La pequeña colección de piezas que se reúnen en una sala, es el testimonio de la riqueza arqueológica de la comarca. La entrada que nos cuesta 1,5€ también nos dio la oportunidad de escuchar atentamente las explicaciones del responsables del museo. Así pudimos entender los restos que van desde el paleolítico a la época islámica. Destaca sobre todo la importancia de la Cueva de la Sarsa, muy próxima a Bocairent, que es de las más relevantes de todo el Levante.

Aunque quizá la pieza que más llama la atención es el «Lleó de Bocairent«, una escultura de origen ibérico muy bonita y llamativa, que me recuerda a los tesoros artísticos iberos de Porcuna en Jaen.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción

El templo fue edificado en 1516 sobre el antiguo alcázar árabe, aunque su decoración y su torre, símbolo de la ciudad son de estilo barroco. Estatuas de los doce apóstoles decoran cada una de las columnas a ambos lados de la nave. A la entrada una antigua fuente labrada en piedra, hace las veces de pila bautismal sobre un pie gótico.

En el altar mayor se conservan unas tablas de Juan de Juanes, parte de un retablo más grande que el famoso pintor estaba realizando cuando la murió en Bocairent. Juan de Juanes fue uno de los máximos representantes del renacimiento valenciano. Nació en la vecina localidad de Fuente la Higuera en 1507, su nombre completo era Juan Vicente Macip. Desarrollo casi toda su carrera en territorio valenciano pintando sobre todo motivos religiosos, trabajando para las diócesis de Segorbe, Valencia y numerosas congregaciones religiosas. En 1579, a la edad de 72 años, le sorprendió una tormenta de aguanieve volviendo de pintar un encargo. Como consecuencia cayó enfermo de pulmonía, y con los caminos cerrados por la nevada que le siguió y dejó aislado al pueblo, sus fuerzas le abandonaron casi con los pinceles en la mano.

La Capilla del Rosario es probablemente la más bonita de las que posee la iglesia. Está decorada con frescos que incluyen escenas de la Batalla de Lepanto, que tuvo lugar el mismo día de advocación de la Virgen del Rosario. San Blas (Sant Blai en valenciano), el patrono de Bocairent también tiene su propia capilla.

San Blas, Patrón de Bocairent
Como anécdota se puede contar, que no fue hasta 1632 cuando Bocairent le dio dicho rango. Fue a raíz de una epidemia que asoló la localidad durante dicho invierno. Sus vecinos se encomendaron al santo que ya era patrón de los cardadores de lana, para sanar los males de gargante, fiebres y gripes. La epidemia se desvaneció y San Blas fue elegido en detrimento de Santiago (o Sant Jaume en valenciano), anterior patrón de la villa.

No hay visita completa sin subir a su campanario. Con sus 41 metros de altura, destaca desde todos los puntos del pueblo, y su inconfundible silueta marca todo el conjunto medieval de Bocairent. El esfuerzo de superar los escalones de subida es recompensado por las excelentes vistas que se disfrutan. De un lado los tejados apiñados del casco antiguo, hacia el oeste el via crucis y el convento, y hacia el este las montañas de Serra Mariola.

Pozo de San Blas

También conocido como Pou de Sant Blai, este pozo de nieve es una de las cosas más curiosas que se pueden visitar. Durante los inviernos, más fríos entonces, abundaban las nevadas en las sierras valencianas. La nieve se acumulaba en este pozo. Se echaba al fondo apelmazándose con finas capas de paja intercaladas. A medida que avanzaba el invierno se iban añadiendo capas y el propio peso convertía la nieve en bloques de hielo. En verano se iba sacando para comercializarlo para mantener alimentos frescos o para realizar sorbetes. El hielo de Bocairent podía en algunos casos viajar en carro hasta la propia Valencia para refrescar a sus habitantes.

Un centro de interpretación con paneles te explican todo el interesante proceso, y da información de los numerosos pozos de nieve que en estas sierras como en tantos otros puntos de España, se aprovechaban las nieves invernales.

Un poco más abajo, un sendero te lleva hasta otro de los rincones más peculiares de Bocairent, las «Covetes dels Moros«, antiguos abrigos horadados en la roca del espolón que se haya frente al casco histórico. Hay docenas de ellos, en diferentes alturas. Se han habilitado algunas escaleras metálicas para acceder a algunos de ellos.

Via Crucis

Otro sendero parte hacia el Puente del Cristo, salva el profundo barranco que se interpone entre el casco histórico de Bocairent y el Via Crucis que asciende zigzagueante hasta la Ermita del Cristo. El ascenso parece desde lejos más costoso y largo de lo que en realidad es… bueno, una vez que te pones… Pero en definitiva compensa y mucho por las vistas que se tienen del pueblo y el entorno.

Dónde comer
Entre los platos típicos de la zona están los gazpachos al estilo de la Serra Mariola,  la Olleta, elaborada con carne de cerdo y pencas,  y la famosa Pericana, que es una especie de salsa para untar hecha a base de aceite de oliva, pimientos rojos y capellanes, una suerte de salazón de pescado. En algunos establecimientos os la ofrecerán para probar.

Hay varios restaurantes en donde probar las especialidades locales, yo voy a destacar uno en el que comimos muy bien:

Restaurante El Cancell – Carrer Sant Roc, 2 – Tel: 619 709 270: Está situado muy cerca del mercado en la confluencia entre el casco histórico y la parte nueva de la villa. Durante el fin de semana se recomienda reservar ya que suele llenarse.

Dónde dormir
Con el avance del turismo rural, ha habido nuevos establecimientos que se han abierto en los últimos años, aquí tenéis dos direcciones que me han gustado especialmente:

L’Agora Hotel – Calle Sor Piedad de la Cruz – Tel: 962 355 039 – www.lagorahotel.com – Este hotel ocupa un edificio modernista de 1925, con bonitas decoraciones en la fachada y mucho encanto en el interior. Habitaciones dobles desde 65€. Casa Rural MiradorCarrer del Batlle, 19 – Tel: 678 575 488 – En pleno corazón del barrio medieval, un lugar muy tranquilo y acondicionado para pasar una buena estancia. Dobles desde 50€.

Hay más información de hoteles y casas rurales en www.bocairent.org/donde-dormir/

Excursiones desde Bocairent
La Serra Mariola tiene numerosos parajes naturales preciosos. Es de destacar el paraje natural del nacimiento del Río Vinalopó, o los senderos como la Ruta del Barranc de la Fos y si sois amantes de la bicicleta, las antiguas vías del ferrocarril a Gandía ofrecen las infraestructuras de la Via Verde del Xixarra, para disfrutar de estos paisajes en dos ruedas.

Otros pueblos de la Serra Mariola y de la Vall d’Albaida que merece la pena conocer son Banyeres de Mariola (a 14kms ya en la provincia de Alicante) y Albaida (a 20kms)

 

Si quieres más información, puedes encontrar todo sobre rutas a pie o en bici, rincones y parajes naturales, qué hacer, qué ver en la página oficial de información turística de Bocairent (www.bocairent.org)