Serie: Rutas por Italia – De Bomarzo a la Isola de Giglio
El recorrido propuesto en esta ruta, nos llevará desde Bomarzo, hasta la Isola di Giglio (isla del Lírio en español). Bomarzo es conocido por ser feudo de los Orsini, una de las familias aristocráticas más poderosas de Roma. Familia que dio numerosos cardenales y papas a la Iglesia Católica. Visitaremos el Parque Bomarzo uno de los más enigmáticos, atractivos y misteriosos parques arquitectónicos del renacimiento italiano. Atravesaremos territorio etrusco, teniendo oportunidad de visitar vestigios de dicha antigua civilización. Con pueblos encaramados en lo alto de colinas, denominados «oppidum» como Grotte di Castro, o Pitigliano. Bordearemos el precioso lago de origen volcánico, pasando por Bolsena, que con su maravilloso castillo domina las orillas del lago.
Más adelante descenderemos lentamente de las altas colinas para descubrir una de las termas al aire libre más bellas de Italia, Terme di Saturnia. En medio de un paisaje agrario, de campos, bosques entre colinas y llanos. Para acabar alcanzando la costa en la preciosa península de Argento. Posesión española hasta bien entrado el siglo XVIII. Los castillos de Porto Ercole y Porto Santo Stefano protegían el comercio y los intereses militares del Imperio Español den aguas toscanas. Desde éste último, embarcaremos en un ferry para conocer la más cercana y mayor de las islas meridionales del archipiélago toscano, la isola di Giglio (Isla del Lírio).
Esta ruta se requiere de 3 a 7 días, según el ritmo al que viajemos, el interés que nos despierten las posibles excursiones y visitas adicionales, y las ganas de relajarnos y permanecer más tiempo con tranquilidad en los distintos lugares que se descubren.
La comarca que atravesaremos en nuestra ruta se halla a medio camino entre Florencia y Roma. Coincide además con la frontera regional entre Toscana y Lazio.
La Ruta completa son 163 km sin contar con la travesía en barco a la isla del Giglio, y en total de automóvil son unas 3 horas de conducción.
Distancias a los aeropuertos más cercanos con vuelos a España:
- Desde Bomarzo: Roma Ciampino (105 km / 1h05′) – Florencia (212 km / 2h) – Pisa (272 km / 2h40′)
- Desde Porto Santo Stefano: Roma Ciampino (165 km / 1h55′ ) – Florencia ( 201 km / 2h23′) – Pisa (200 km / 2h10′)
Qué visitamos en este post
En el siguiente mapa interactivo se describe el itinerario seguido de «Rutas por Italia: De Bomarzo a Giglio». En él podrás localizar con exactitud todos los lugares de los que se habla en este artículo, y en los artículos complementarios de esta ruta:
Artículos complementarios sobre la Ruta:
Otros artículos sobre Lacio y Toscana:
En Ruta: De Bomarzo a Giglio
A/ Bomarzo: El Parque de los Monstruos
Bomarzo es un pueblecito del Lacio, enmarcado en una colina entre bosques, que ha quedado ligado históricamente a la figura de Pierfrancesco Orsini, un gran personaje del siglo XVI italiano, que casó con una sobrina del cardenal Alejandro Farnesio. Bomarzo y Pitigliano fueron sus feudos (ambos visitados en esta ruta). Aquí se conserva su palacio renacentista, y el jardín más intrigante del seicento italiano, el Parque de los Monstruos.
El Parque de los Monstruos está jalonado de una colección de esculturas enigmáticas, fantásticas e imaginativas que han causado intriga desde su construcción hasta hoy. Inspirando, inquietando, fascinando hasta ser considerado por algunos como un viaje iniciático.
Tortugas gigantes, elefantes en liza, cabezas de dioses, seres mitológicos, casa inclinadas y hasta tortugas que llevan a cuestas obeliscos son algunas de las obras que sorprenden al visitante. Presidiendo el jardín está el Templete de Giulia Farnese, esposa de Pierfrancesco Orsini. El duque falleció en 1583 quedando el parque abandonado durante siglos, para no ser redescubierto hasta principios del siglo XX, cuando muchos viajeros ilustres, Dalí entre ellos, comenzaron a visitarlo sintiéndose inspirados por esta obra tan peculiar.
(Puedes visitar nuestro artículo Bomarzo: El Parque de los monstruos para saber más de este parque)
>> De Bomarzo a Bolsena – 45 km (45′)
B/ Bolsena: Lago y Castillo
Bolsena es una pequeña localidad en la costa nordeste del lago homónimo. Sus orígenes se remontan a la época romana, cuando éstos conquistaron Orvieto. La población original de la vecina ciudad etrusca fue reubicada aquí. Orvieto deriva del latín «Urbs Veteris» o antigua ciudad, ya que su nombre anterior era precisamente Bolsena.
El lago ocupa una antigua caldera volcánica extinta hace más de 300mil años. Y sus riberas corresponden a los escarpes de su cono. La ciudad es un conjunto histórico muy bien conservado con mucho encanto. Sus calles empedradas esconden bellos rincones, y algunos tesoros históricos y artísticos.
Rocca Monasdeschi della Cervara & Basílica de Santa Cristina
Son sus dos principales monumentos. Durante el Medievo, Bolsena estuvo bajo la influencia de la familia Monaldeschi, quienes erigieron el castillo medieval que domina la ciudad. La fortaleza conocida como Rocca Monaldeschi della Cervara alberga hoy el Museo Territorial del Lago Bolsena. En el otro extremo de la parte monumental, la Colegiata de Santa Cristina es un bello ejemplo de arquitectura románica y alberga una capilla con frescos de 1498. En 1976, el Papa Pablo VI le otorgó la categoría de Basíilica Menor.
Bolsena y el Corpus Christi: El Milagro de Bolsena
La celebración católica del Corpus Christi tuvo su origen histórico en esta localidad. En 1263 un sacerdote que realizaba la peregrinación a Roma por la Via Francigena, se mostró escéptico con la transubstanciación en la Eucaristía. Según la tradición cristiana, fue el mismo Dios quien hizo que las hostias al ser consagradas en la misa comenzaran a exudar sangre. Informado el Papa Urbano IV que en ese momento se encontraba en la vecina Orvieto, decidio estudiar el caso. Tras un examen de las pruebas milagrosas decidió establecer el día del Corpus Christi o Corpus Domini.
>>De Bolsena a Grotte di Castro – 16 km (20′)
C/ Grotte di Castro:
A medida que se asciende desde el lago Bolsena, se divisa la orgullosa silueta de Grotte di Castro coronando una colina con vistas al mismo.
>>De Grotte di Castro a Pitigliano – 22 km (25′)
D/ Pitigliano: Palacio, Catedral e Iglesia de San Roque
Pitigliano es otro pintoresco pueblo de origen etrusco ubicado en lo alto de una colina, con sus casas desafiantes sobre la quebrada de roca. Como Bomarzo, también ligado históricamente a la familia Orsini. Antes de llegar al centro conviene desviarse hacia el sur, hasta la iglesia de Madonna della Grazie, para disfrutar de la mejor vista del pueblo en su conjunto.
Pitigliano se eleva sobre la característica toba volcánica, de ahí el apodo de “Cittá del Tufo”. En su mágico perfil desde el mirador, entre las casas colgadas sobre las rocas, sobresalen el Palacio Orsini, la Catedral y la Iglesia de San Roque que son los principales monumentos que se deben visitar.
Pitigliano es también famoso por su barrio judío, que se encuentra a un lado de la catedral y conserva una Sinagoga convertida en un Museo Hebraico. Los judíos de Pitigliano eran de orígen sefardí, provenientes de España tras su expulsión de la península en 1492. Junto a la sinagoga no dejéis de probar un café con dulces típicos hebreos en el Forno del Ghetto di Francesca. (Via Zuccarelli)
>> De Pitigliano a Termas de Saturnia – 25 km (30′)
E/ Terme di Saturnia
Si aún quedan fuerzas, y el tiempo lo permite, muy cerca de Pitigliano se encuentra una de las fuentes termales naturales más populares de Italia, Saturnia. Un baño en sus aguas es una buena forma de terminar el día. Son de acceso gratuito, tan solo hay que pagar el parking para un día entero o medio día (unos 6€). En verano puede estar demasiado concurrido, pero lo especial del lugar, la belleza de sus cascadas y lo peculiar de sus aguas termales hacen de la visita una experiencia inolvidable. Si se puede visitar en otra época del año, por ejemplo cuando no hace tanto calor, el contraste con las cálidas aguas hace del baño una delicia y no hay tanta gente, mucho mejor.
>>De Termas de Saturnia a Porto Santo Stefano – 60 km (1h)
F/ Porto Santo Stefano
La carretera desciende las colinas toscanas hacia la llanura costera. Como una gran montaña que surge del mar se presenta al fondo el Monte Argentario. Otrora una isla, hoy queda unido a tierra firme por tres barras arenosas por las que discurren sendas carreteras. Nos dirigimos hacia Porto Santo Stefano para tomar el ferry que nos llevará a la Isola del Giglio.
Antes de tomar el barco, podemos pasear por el paseo marítimo y descubrir el Castillo Español. Un antiguo presidio que hasta el siglo XVIII perteneció al Reino de España.
>> De Porto Santo Stefano a Isla del Giglio – 1h30′ Travesía en Ferry
G/ Isola de Giglio
Junto al puerto hay varios aparcamientos preparados para guardarte el coche durante el tiempo que decidamos permanecer en las islas, ya sean uno, dos o más días. Aquí os dejo una referencia de un parking donde podréis dejar el coche a precios razonables. (www.parcheggiofanciulli.it)
Con numerosas frecuencias en verano, la travesía dura una hora y media aproximadamente. Y hay servicios a otras islas más pequeñas y alejadas del archipiélago toscano. Podéis usar una de las dos compañías que realizan la travesía y comprar los billetes en alguna de estas webs. (www.toremar.com o www.traghetti.com)
Las dimensiones de la isla son tan pequeñas que para recorrerla bastaría con alquilar unas motocicletas, es el medio más divertido y cómodo. (Un ejemplo de alquiler de scooters en la Isla del Giglio). También se puede optar por quedarse en el pueblo, deambular entre sus calles, sus tiendas y disfrutar de sus restaurantes de pescado frente al puerto. Al final de su paseo marítimo hay una playita perfecta para darse un baño, y se pueden descubrir muchos rincones muy pintorescos.
Una vuelta a la isla
Desde Giglio Porto, una carreterita serpentea la colina hasta su cima, en la que se encuentra Giglio Castello. Son tan solo 7 km, para dominar un precioso panorama de toda la isla, y las vecinas islas del archipiélago. La callejuelas de este pueblo coronado con un castillo medieval sirven de escenario para las imágenes más tópicas y típicas de la Italia profunda.
Más abajo en la otra cara de la isla, la costa occidental de la isla del Giglio está dotada de playas de arena blanca estupendas para el baño. Giglio Campese es un lugar ideal para relajarse, pegarse un baño y nadar. Su playa está vigilada por una antigua torre de construcción española, la torre del Campese. Ida y vuelta, incluyendo la visita de Giglio Castello son unos 25 km.
Dónde dormir:
En Bolsena:
VesConte – Palazzo Cozza Caposavi: Piazza San Rocco,12, 01023 Bolsena, Viterbo. Tf: +39 3428 530373 (www.vesconteresidenza.com). Un palacio renacentista en el centro histórico de Bolsena, a escasos metros del lago. En él se han alojado un buen número de miembros de personajes ilustres incluyendo miembros de la realeza europea, ilustres cardenales y hasta algún papa. Desde 90€ la habitación doble con desayuno.
En Grotte de Castro:
108 B&B: Via Vittorio Veneto, 108, 01025 Grotte di Castro. Tf: +393387119944. Nos encantó este establecimiento junto al casco histórico de la villa. Se alquila por habitaciones pero se podría alquilar entero (tiene tres). Totalmente renovado, con camas comodísimas, baños amplios y todos los servicios impecables. Algunas habitaciones incluso tienen unas vistas maravillosas. Además la señora que lo lleva es encantadora y nos ayudó en todo momento. Grotte di Castro asimismo está muy bien situado en la confluencia de las tres regiones centrales de Italia (Lacio, Umbria y Toscana), y es una base ideal para descubrir lugares increíbles en su entorno como Pitigliano, Termas de Saturnia en el sur de la Toscana o Bolsena, con su precioso lago, las tumbas etruscas y Civita di Bagnoregio en Lacio, o la ciudad monumental de Orvieto ya en Umbria. Una doble desde 66€ con desayuno.
En Talamone – Junto a Porto Santo Stefano y Porto Ercole
Hotel Capo D’Uomo: Via Cala Di Forno 7, 58010 Talamone, Grosseto. Tf: +39 0564 870068 (www.thecaesarhotels.com/en/capo-d-uomo). Talamone formo parte de las territorios españoles en Italia agrupados como Presidio durante casi 300 años. Hoy es un tranquilo y coqueto pueblo dominado por la Fortaleza Aldobrandesqui frente al Mar Mediterráneo. El hotel tiene unas estupendas vistas al mar, al Monte Argentario y a la isla de Elba, un agradable jardín e incluso una playa (más bien una ensenada de rocas) casi privada. Desde 90€ la habitación doble con desayuno.
Dónde comer:
En Bomarzo:
La Fraschetta degli Antichi Sapori: Via Mentana 2, Piazza Bruno Buozzi, 01020 Bomarzo. Tf +39 329 653 6475. Situado en una antigua bodega excavada en la roca volcánica y decorado con sencillez y gusto. Tiene una terraza con vistas al Palacio Orsini. Pasta deliciosa y carnes estupendas a buen precio. Alrededor de 20€/persona.
En Pitigliano:
Trattoria Il Grillo: Via Cavour 18, 58017 Pitigliano. Tf: +39 0564 615202. Pequeño restaurante a la entrada del pueblo decorado con mucho gusto. Excelentes pizzas y pastas. Alrededor de 20€/persona.
En Giglio Porto:
L´Archetto: Via Umberto I, 58012 Isola del Giglio. Tf: +390564809221 Una terraza sobre la playa en una plataforma de madera cubierta con madera y brezo y muy bien arreglada, elegante acogedora y con vistas al puerto y su movimiento. Especialidad en pescado fresco y marisco, pasta con almejas y mejillones, etc. Comimos rico por 130€ 6 pax. Unos 22€. pp Muy recomendable