La Rioja Alta y la Rioja Alavesa se miran frente a frente separadas por el río Ebro: al norte del mismo, Rioja Alavesa; y al sur, Rioja Alta. Sus paisajes ondulados y cubiertos de viñas, se extienden a unos 480 metros de altitud media sobre el nivel del mar, con condiciones idóneas para el cultivo de viñas y producción de vinos.
Frontera entre territorios cristianos y árabes, y más tarde también entre los Reinos de Castilla y Navarra, ambas comarcas poseen un rico legado arquitectónico e histórico: iglesias románicas, pueblecitos medievales, castillos señoriales… Todo este patrimonio se reparte por una geografía amable y acotada por sierras discretas que parecen querer decorar nuestra visita y hacernos disfrutar tanto de sus vinos como de sus paisajes.
En la Rioja Alta destacamos en nuestra visita localidades monumentales como Briones, San Vicente de la Sonsierra o Casalarreina; pequeñas rutas del románico que pasan por pueblecitos como Cuzcurrita, Sajazarra o Cihuri.
La Rioja administrativamente es una de las 17 comunidades autónomas que conforman España, y sus límites engloban la mayor parte de los territorios de la DOC Rioja. La DOC de Rioja a su vez, no cubre toda la región de La Rioja, pero engloba algunas comarcas meridionales de la Comunidad Foral de Navarra y la parte más meridional de la provincia de Álava.
Los territorios abarcados por la DOC Rioja, a su vez se pueden dividir en tres zonas; Rioja Alta, Rioja Alavesa y Rioja Baja.
Rioja Alta: Parte noroccidental de la Comunidad Autónoma de La Rioja. De forma aproximada coincide con la ribera sur del Ebro desde Haro a Logroño (unos 50kms longitudinalmente)
Rioja Alavesa: Parte meridional de Álava. La ribera norte del Ebro que baña tierras vascas.
Rioja Baja: Parte oriental de la Comunidad Autónoma de La Rioja y las comarcas navarras de la ribera norte del Ebro desde Logroño hasta Alfaro. (Unos 75kms longitudinalmente)
Bajo Sancho III Garcés o el Grande -990-1035- el Reino de Nájera-Pamplona (Navarra) adquiere su máxima extensión, haciéndose con el territorio de Castilla por su matrimonio con la hija del Conde Castellano. A su muerte, sus reinos quedan divididos entre sus hijos en herencia, y Fernando se proclama primer rey de Castilla.
A partir de ese momento y durante todo el siglo XI, la expansión castellana sobre la parte occidental de la región actual de la Rioja y de Álava comenzó a hacerse patente, y localidades como Nájera o Laguardia pasaron a ser fronterizas entre ambos reinos.
La situación continuaría así durante los siguientes dos siglos, hasta que finalmente Castilla se haría con el control de la práctica totalidad de lo que hoy conocemos por La Rioja, y absorvería paulatinamente los distintos territorios del País Vasco en sucesivas expansiones, siendo la última la incorporación de Guipúzcoa en 1200, a través de un acuerdo por el que los guipuzcoanos aceptaban la soberanía castellana a cambio del respeto de los fueros y usos propios del territorio.
El Reino de Navarra quedaría reducido a su extensión actual (al menos la parte española al sur de los pirineos), a partir del siglo XIII, y así se conservaría hasta su incorporación a la Corona de Castilla en 1510.
En el mapa están situados los lugares descritos en este artículo en color verde oscuro. Puedes usarlo para navegar y llegar hasta los mismos.
Como explicaba en la introducción la comarca de la Rioja Alta se extiende a lo largo de la ribera al sur del Ebro, de Haro a Logroño. Habría que añadir la excepción del municipio de San Vicente de la Sonsierra, cuña altorriojana entre tierras alavesas al norte del Ebro.
La comarca de la Rioja Alta es la de mayor influencia castellana. Influencia que es patente desde el paisaje (muy similar a su comarca vecina burgalesa de la Bureba) en la arquitectura de sus poblaciones, y sobre todo en los antiguos testimonios históricos que nos han dejado sus monumentos, siendo precisamente la Rioja Alta, por ejemplo la única comarca de la región de La Rioja donde es posible encontrar abundancia de ejemplos del románico rural. (Para ver más sobre La Rioja Alta y su riqueza monumental medieval, puedes consultar el artículo http://www.carlosdeviaje.com/rioja-en-bici/)
En este artículo vamos a hablar de dos de las localidades más monumentales y bonitas que se pueden encontrar en La Rioja, que se miran la una a la otra desde lo alto de sus cerros a uno y otro lado del río Ebro: Briones y San Vicente de la Sonsierra.
Briones
Un buen punto para emprender nuestra visita y tomar como base para visitar esta comarca es el pueblo de Briones. Forma parte de «Los Pueblos más bonitos de España«, y no hace falta explicar el porqué. Dicen que toma su nombre de los antiguos pobladores celtíberos que por aquí moraban a la llegada de los Romanos, los Berones. Y su disposición en lo alto de un cerro junto al río Ebro, explica de por sí, que cumpliera con las necesidades de refugio y defensa de aquella época. Hoy disfruta de unas excelentes vistas sobre las vegas repletas de viñas y el horizonte tapizado de vides, sierras y otras poblaciones siempre agrupadas en torno a antiguos castillos.
En el siglo XIII, Alfonso X El Sabio, le otorgó el fuero de Vitoria para favorecer su repoblación y fortalecer sus posiciones frente al Reino de Navarra. Su sucesor Fernando III El Santo, nombró a Diego López de Haro III como I Señor de Briones.
En el Siglo XVI, se contaban hasta 30 apellidos vascos entre sus familias, entre las que se encontraban ejemplos de personajes que participaron en las conquistas de ultramar como Pedro de Hircio que participó en la Conquista de México con Hernán Cortés quien le nombró primer Justicia y Gobernador de la ciudad. (No os perdáis la Capilla de los Hircios o Ircios en la Iglesia Parroquial de la Asunción)
El siglo XVI fue una época de expansión y riqueza, en el que se acometieron obras monumentales como la ya mencionada Iglesia de Briones. Durante el Barroco, y concretamente el siglo XVIII, Briones también gozó de prosperidad, y son varios los ejemplos de construcciones que se conservan.
A pesar de su esplendoroso pasado, Briones hoy no llega a los mil habitantes, pero gracias a sus viñas y vinos goza de una acomodada posición económica. Es sede de numerosas bodegas reconocidas.
Plaza de España de Briones
Para comenzar la visita lo mejor es dirigirse a la Plaza de España, un espacio triangular presidido por la majestuosa Iglesia de la Asunción. Justo a su lado, se abren los soportales de un edificio adyacente a la torre que aquí llaman la abadía. El Palacio del Marqués de San Nicolás hoy sede del Ayuntamiento destaca en otro de sus lados. Por último una Casona Medieval y una singular Botica del siglo XIX cierran la plaza por su lado meridional.
Para orientaros mejor en la visita de Briones, aquí tenéis un Plano-Guía gentileza de la Oficina de Turismo de Briones.
Iglesia de la Asunción:
Es una imponente iglesia de estilo gótico isabelino con planta de salón (siglo XVI). De visita imprescindible por su belleza arquitectónica y por el conjunto de obras artísticas que atesora. Sus dimensiones impresionan, la armonía del espacio y la altura de sus naves la convierten en una de los ejemplos de arquitectura religiosa más notables de toda La Rioja.
Destacan el retablo mayor dedicado a la Asunción de la Virgen, el excepcional órgano que data de 1765 muy bien conservado, la escalera monumental que da acceso al coro compuesto por 23 asientos altos y 14 bajos tallados en madera de nogal en 1710 y la Sacristía, obra barroca de 1671 que cuenta con valiosos frescos. La parroquia cuenta además con una colección destacada de Cantorales en pergamino. Entre las Capillas laterales, destacar la Capilla de los Hircios, familia de Briones con destacados personajes históricos.
La Torre de la iglesia de Briones es un ejemplo magnífico del barroco riojano. Fue proyectada por Martín de Beratúa y Martín de Arbe en 1756. Su elegancia guarda una similitud marcada con las torres de las catedrales de Logroño y Santo Domingo de la Calzada.
Casona en la Plaza:
Esta casona está considerada como el edificio civil más antiguo de La Rioja. Su disposición en dos plantas guarda todas los elementos típicos de la arquitectura tradicional medieval, en la que las plantas edificadas iban sucediéndose con materiales cada vez menos pesados, utilizándose piedra para la planta baja, ladrillos con entramados de madera para la primera planta, y a menudo una segunda planta en adobe.
La Botica de Rabal:
Un bello ejemplo de como eran las farmacias a finales del siglo XIX. ¡Como hay que agradecer a los familiares de Don Ismael Rabal, que hayan conservado el espacio tal como era hasta nuestros días! Curiosear como se ordenaban las plantas medicinales en cajones de madera, los frascos, los utensilios de entonces o los espacios reservados para los estupefacientes es toda una experiencia.
Palacio del Marqués de San Nicolás:
Es uno de los ejemplos de arquitectura civil del siglo XVIII más destacados de La Rioja. Fue edificado por el II Marqués en 1755. En el siglo XIX, cuando el Marqués fue designado alcalde, trasladó hasta él las dependencias municipales que desde entonces han estado aquí. El Palacio es hoy propiedad de la Comunidad Autónoma y alberga además del Ayuntamiento, un centro de exposiciones. La fachada principal que da a la plaza tiene labrados dos escudos familiares del marqués.
Otros puntos de interés en Briones
Otros dos ejemplos de arquitectura civil en Briones que no puedo dejar de mencionar son: el Palacio de los Quincoces en la Calle Mayor, de estilo renacentista, y del que se dice que los reyes Enrique II de Castilla y Carlos II de Navarra acordaron la boda de sus hijos; y el Palacio de los Gadea en la Calle de La Rioja, que se asemeja en diseño y estilo del de los Marqueses de San Nicolas; ambos están a menos de dos minutos caminando de la Plaza de España.
En cuanto a la arquitectura militar, se han conservado dos de las seis puertas de las murallas que en su día rodeaban Briones. Las defensas medievales quedaban completadas en la esquina noroeste por las ruinas del castillo y su torre del homenaje, y en la noreste por el Torreón, que fue convertido en casa solariea de los Sáenz Cenzano.
Por último a la entrada del casco histórico, nos encontraremos con un singular templo octogonal, se trata de la Ermita de San Juan o del Santo Cristo de los Remedios. Muy querido por todo el pueblo, pues aloja de septiembre a mayo la imagen de su patrono, el Santo Cristo de los Remedios. Estilo barroco (1737-1748)
Una vez visitado el centro histórico de Briones no podemos dejar la localidad sin visitar alguna de sus bodegas. (En el mapa de la villa cedido por gentileza de su oficina de turismo podréis ver los nombres y datos de contacto). Las más relevantes desde el punto de vista turístico son las Bodegas Vivanco que cuentan con un completo Museo de la Cultura del Vino.
Bodegas Vivanco y Museo de la Cultura del Vino
Situado a poco menos de un kilómetro del casco histórico, las nuevas instalaciones de estas tradicionales bodegas Riojanas incluyen un completísimo museo en el que se explica la relación que ha tenido el vino con la civilización a lo largo de las diferentes épocas de la historia. Se puede combinar una visita por libre del museo con una visita guiada de las bodegas y degustación de vinos, o incluso añadir un curso de cata. Desde 15€ la visita por libre del museo hasta los 40€ que cuesta la visita del museo + bodega + menú de tapas. (Más info en www.vivancoculturadelvino.es)
Bodegas y Museo se encuentran rodeados del Jardín de Baco, un jardín de viñas de acceso libre en el que sin duda los más curiosos disfrutarán descubriendo las más de 200 variedades de cepas que proceden de todos los rincones del mundo. Es sorprendente ver las variedades de vides, su tamaño, los distintos tipos de hojas, y si visitáis el lugar a finales de verano, tendréis además la oportunidad de ver los distintos tipos de uva y tipos de racimo. Ya sólo estos jardines son de por sí una visita interesante.
San Vicente de la Sonsierra
Son sólo 5kms los que hay que recorrer por un llano meandro del río Ebro hasta San Vicente de la Sonsierra. Según nos vamos acercando en el horizonte se va dibujando con mas nitidez la silueta del cerro del castillo que ya apreciábamos desde Briones.
San Vicente de la Sonsierra: Villa Divisora
En el escudo de armas San Vicente de la Sonsierra queda patente la situación estratégica de la villa entre los Reinos de Castilla y de Navarra. El Puente sobre el río Ebro está reflejado en su parte inferior. Sobre el mismo un brazo empuña una espada que divide los cuarteles de Castilla y de las cadenas de Navarra.
Cerro del Castillo
Nos dirigiremos directamente a su cima para visitar las ruinas del Castillo de San Vicente y la Iglesia de Santa María la Mayor. Desde aquí la vistas son magníficas. Al norte la Sierra de Cantabria, hacia el suroeste Briones, más al este se distingue el castillo de Davalillos, y hacia abajo el histórico puente de piedra sobre el Ebro.
La Iglesia de Santa María la Mayor, del gótico tardío (fines del Siglo XVI) posee un precioso retablo renacentista. El buen estado de conservación contrasta con las ruinas del castillo que una vez perdida su utilidad militar fue poco a poco utilizado de cantera para diversas construcciones. A los pies del cerro, en donde se inicia el camino hacia el centro histórico, nos encontraremos la Ermita de San Juan, sede de la Cofradía de la Veracruz.
Calle Zumalacárregui y Plaza Mayor
Desde el castillo el paseo hasta la Plaza Mayor discurre por la Calle Zumalacárregui en la que encontraréis buenos ejemplos de casonas de piedra con preciosos escudos de linajes nobles. La Plaza Mayor está presidida por el Ayuntamiento, bonito edificio renacentista con soportales. Frente al mismo, la fuente en la que tradicionalmente en las fiestas patronales de la Virgen de los Remedios, patrona de la Villa, los romeros se pegan un chapuzón después de la procesión hasta el castillo. (Del 7 al 12 de Septiembre)
Escudos de Armas & Casas Blasonadas
Es una constante en estos pueblos de La Rioja Alta la abundancia de Casas Solariegas que vienen acompañadas de sus respectivos escudos nobiliarios. Posiblemente esta parte de La Rioja, junto con el País Vasco y Cantabria sean los territorios de la antigua Corona de Castilla donde más familias de linajes nobles tienen su origen. Los «Hidalgos» (hijos de algo) aunque no tuvieran ningún otro título nobiliario, tenían a bien marcar sus casas con sus armas y distintivos tanto por razones de prestigio como por razones impositivas, ya que los hidalgos estuvieron exentos de pagar impuestos durante largas épocas de la historia. Éstas pueden ser sin duda razones de peso para encontrar tantos blasones exquisitamente labrados durante nuestra visita. Aquí tenéis algunos de lo mejores ejemplos que podemos encontrar en San Vicente.
El Puente Medieval y la Ermita de Santa María de la Piscina
Ya fuera del casco histórico, no dejéis de visitar su Puente Medieval que estuvo fortificado hasta 1775, y que sirvió durante siglos para el cobro de derechos aduaneros entre los reinos de Castilla y Navarra.
La Ermita de Santa María de la Piscina es una joya de la arquitectura románica, y sin duda, uno de los mejores ejemplos de dicho estilo en La Rioja. Su existencia se remonta al siglo XII cuando el Infante Ramiro Sánchez, el hijo del Rey de Navarra, que establece el linaje de los Piscina, la manda construir. La ermita está a unos 4kms de San Vicente en dirección a Peciña, una pequeña pedanía de San Vicente, cuyo nombre también deriva de dicha dinastía.
Si os apasiona La Rioja como a mí, no dejéis de realizar en otra escapada o como continuación otras rutas turísticas por estas preciosas comarcas de Rioja Alta y Rioja Alaves:
1/ Ruta: «Pueblos con encanto de La Rioja Alta» – Casalarreina, Cuzcurrita del Río Tirón, Sajazarra, Cihuri.
2/ Ruta: «Rioja Alavesa: Laguardia y Elciego» – Laguardia, Elciego, Samaniego, Labastida
3/ Ruta: «Monasterios de La Rioja Alta» – Nájera, San Millán de la Cogolla y la Abadía de Cañas
4/ Ruta: «Santo Domingo de la Calzada y su entorno» – Santo Domingo de la Calzada, Ezcaray, Bañares.